miércoles, 27 de marzo de 2013

Encontrando antiguos amigos

En el cole de Guevejar (Granada), Caperucita encontró a Leticia, una de las maestras cuenteras que en el 2001 hizo posible que la exposición se pusiera en marcha y que rebuscando y rebuscando entre sus cosas encontró otros elementos que antes acompañaban a este fantástico personaje y aquí los tenéis, por un lado esa cabeza de lobo realizada, en goma espuma, con auténtica pericia y que colocada sobre la cabeza del esqueleto da hasta miedo, y la cortina de detrás elaborada en una de las escuelas por donde pasó y que viñeta a viñeta nos relata escenas del cuento...
Ambos elementos irán a enriquecer la exposición...Esperemos que no aparezcan muchos más si no Caperucita mas que viajar en coche necesitará pronto un camión de mudanzas.


Un lobo descarnado de aspecto la mar de fiero


martes, 19 de marzo de 2013

viernes, 15 de marzo de 2013

De lo que me contaba Caperucita viajera

Caperucita cambió de lugar, después de pasar casi un mes en la Biblioteca de las Palomas , se fue al colegio Público Jardín de la Reína donde se lo pasó fenomenal.
Hoy ha terminado sus andanzas en el Colegio público de Güevejar y el lunes comienza la exposición en el Colegio Público Abadía de Albolote... como veis la niña no para..
En esta foto en pleno traslado se me quejaba de que se marea en el coche, pero que le encanta que los chicos y las chicas de todos sitios se lo estén pasando tan bien visitando su exposición y leyendo todo lo que se dice de ella.

A la puerta del Colegio Jardín de la Reina 
  

domingo, 10 de marzo de 2013

Caperucita Colorada

Este cuento que os traigo lo escribí después de escuchar a un Cuentacuentos relatarlo en una de las Semanas de la Oralidad. Me hicieron falta muchas semanas para encontrar las palabras que van bien con el texto. Aparece en el libro CUENTOS QUE CABEN EN UN BOLSILLO, pero tengo que reconocer que cada vez que lo cuento le añado vocablos nuevos haciendo que cada vez resulte diferente.
Estoy segura de que lo mismo os ocurrirá a vosotros.

Uno de los trabajos manuales que anima la exposición

En Cuenca contaba Caperucita con una capa con capucha colorada que su comadre Carmela le cosió con cuatro cortes de crochet. Se la colocaba en la cabeza y correteaba contenta por la campiña.
Carmela cogió a Caperucita y le contó: corre a casa la camarada Catalina con el capazo y la comanda; un kilo de queso de cabra  coruñés, cuatro cocos, un cucurucho  de castañas caramelizadas, un cuartillo de comino, un cuenco de café, consomé, coca cola, catorce caramelos y quince comprimidos de cafiaspirina para la congestión ya que convalece de un resfriado. Más querida cuidado con el cruento carnívoro Katangués que querrá comerte.
Convencida Caperucita con la canasta en el codo y el carro de la compra caminaba contenta cuesta a cuesta, cogía capullitos carmesíes, campanillas, clavelinas coloradas, caléndulas y crisantemos. Cortaba caquis y kiwis, cantaban los cuclillos, los canarios y los colorines, crujían las curianas en las cuevas, correteaban las cucarachas y las carcomas en sus cavernas, comían cañas los koalas y conejos las cabras.
Cuando el carnívoro cayó contra la criatura, cauteloso y cariñoso, con concupiscencia, la cameló, la cuestionó y conocido lo que quería corrió a casa la camarada Catalina.
¡Catacrás! de un castañazo se cargó la cadena, el candado y la cancela, la camarada compungida y colapsada cayó conmocionada quebrándose el cuello contra la calle, el katangués se la comió ¡qué cabrito!
 Cumpliendo su cometido se compuso, se colocó el corsé de Catalina, el corpiño, el canesú, el kimono, la cofia, la capa, los calcetines y el calzado de casa y se cubrió en la cama la cara con la colcha.
Cuando Caperucita compareció en la cabaña a las quince y cuarto contempló la cancela y comentó: ¡canastos cuánto kaos!
El carnívoro la convidó a la colcha de la cama y la convenció: querida cantemos en karaoke una canción de Camela o me cuentas el cuento de los cuarenta cabritillas y el coyote Camilo.
Cautelosa Caperucita se colocó, la contempló y le comentó:
-¡Camarada cuántos cuernos caen de tu cogote!
-Creo que cuento con quince- contestó el carnívoro
-¡Camarada qué cara tan colorada comportas!
-Claro querida, el calor canicular de la candela.
-¡Camarada Catalina qué cola tan kilométrica cae de tu culo!
-Calla Caperucita qué cargante me caes caprichosa.
-¡Catalina con qué colmillos tan cariados cuentas!
-Caperucita qué cotilla y curiosona.  
Y cabreado cayó contra la criatura y de cuatro colmillazos se la comió completa y sin catarla.
Cuando el cazador de la comarca Camilo Cortés compareció con la canana completa, el cuchillo carnicero, la kalamikof cargada y su catana, contempló la casa sin clientes.
Y colorín colorado, el cuento de la Caperucita Colorada, la Camarada Catalina y la comadre Carmela ha capitulado…..
 
                                               






lunes, 4 de marzo de 2013

CUENTOS QUE CABEN EN UN BOLSILLO

No podía faltar el presentaros mi segundo libro de cuentos, en el podéis encontrar un montón de historias y de dinámicas que explican como contarlas: cuerdas, papel, papel doblado recortado, rasgado, dibujado, arena.... y un montón de cosas mas. Para quien esté interesado en tenerlo basta con que se ponga en contacto conmigo, por medio de este blog, a la dirección de correo que aparece en mi perfil, en Granada deciros que lo tenéis en las librerías Imagina y en Escuela Popular.
La preciosa portada está hecha por mi amiga Pepa Mora con la que tuve el placer de compartir la publicación del cuento SINFONÍA PARA UN CEPILLO ROTO.

Magia y fantasía al alcance de todas las edades