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viernes, 31 de diciembre de 2021

HISTORIA AMOROSA DE MONOS Y MONAS

Del poema al collage …


La poesía es una forma de divertir y excitar la curiosidad por la literatura en las criaturas. Ayuda a desarrollar el intelecto, estimula su confianza, despierta la sensibilidad y favorece el desarrollo del lenguaje.

Hemos elegido la poesía “Historia amorosa de monos y monas” por ser un tema cercano a nuestro alumnado de infantil y primaria (debido a su interés por los animales), tener estrofas repetitivas de cierta sonoridad, ser una historia sencilla y afectiva, muy apropiada para conectar con los intereses de las criaturas.

Para facilitar su aprendizaje después de secuenciarla, la hemos ilustrado utilizando para ello la técnica del collage. Habiendo elegido, en nuestro caso, para ello:

 - Distintos tipos de papel: celofán, charol, de revistas, de periódicos. -  Cartones lisos como soporte para las ilustraciones. - Materiales de la naturaleza: hojas, ramas,... - Cuerdas. -Telas.

El uso de gran variedad de materiales hace esta actividad aún más llamativa, lo que facilita la comprensión de la poesía.



POESÍA:

Esto eran tres monos,

hijos de una mona,

que estaban muy tristes

por no tener cola.

Su madre trataba

de hacerles reír:

daba volteretas

igual que un delfín,

brincaba y corría

de aquí para allí,

saltaba a la comba,

tocaba el violín…

Pero los tres monos,

hijos de la mona,

seguían muy tristes

por no tener cola.

Vinieron tres monas

de selvas lejanas,

hijas de otra mona,

pues eran hermanas.

Andaban muy tristes

con sus largas colas:

a ellas les gustaban

las colitas cortas.

Su madre trataba

de hacerles reír:

daba volteretas

igual que un delfín,

brincaba y corría

de aquí para allí,

saltaba a la comba,

tocaba el violín…

 

Pero estaban tristes

aquellas tres monas

porque les gustaban

las colitas cortas.

Un día en verano

los monos sin cola

subidos a un árbol,

vieron a las monas

con sus caras tristes

y sus largas colas.

Las monas bajaron

a ver a los monos

que no tenían cola

y estaban tan solos.

Y se enamoraron

las monas y monos

con solo mirarse

a sus tristes ojos.

Para celebrarlo

igual que el delfín,

daban volteretas

que no tenían fin,

brincaban corriendo

de aquí para allí,

saltando a la comba,

tocando el violín…

Cuando se agotaron

de tanto trajín,

hicieron las bodas,

comieron perdiz

y a mí no me dieron

por no estar allí.

 

Ventana de colores (ANAYA)

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