El cuento del capitán o la capitana que se hace con papiroflexia es uno de los más sencillos de contar y lo tenéis en páginas anteriores. Después de aprenderlo estos fueron algunos de los preciosos barcos que hicieron alumnos y alumnas de los profesores que asistieron al curso, En estos barcos las vela se abren para dejar escrito nuestros más bellos sueños.
El barco de mi amiga Electra |
Con los cuentos de manos y dedos estás han sido dos de las aportaciones más fáciles de aprender.
El campesino y las fresas
Inizia ad arare il campo:
prima in fondo,
in cima e in fondo.
Poi zappetta.
Fa qualche buchetta.
Semina.
Piove.
No, grandina!
Finalmente arriva il sole!
Saranno nate le fragole?
Era una vez un campesino que llega al campo
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Se cuenta en parejas, una frente a otro sujetando el brazo
descubierto del compañero
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Comienza a arar el campo,
primero en la parte de abajo,
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Con los dedos va trazando surcos de abajo hacia arriba con dos dedos
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luego en la parte de arriba
y de nuevo en la parte de
abajo
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Repite en sentido contrario
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Después con la azada
hace unos agujeritos
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Con los dedos señala como si cavara
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Siembra
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Picotea como si sembrara
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comienza a llover
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Golpecitos suaves con los
dedos
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no, graniza
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Golpecitos mas fuertes
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finalmente sale el sol
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Masajes suaves
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Habrá sorpresas?
Nacerán por fin las fresas?
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Se mira el antebrazo, normalmente de los roces saldrán algunas trazas
rosas
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El caballero y los bandidos
un brigante si nasconde,
un brigante si nasconde,
un brigante si nasconde,
un brigante si nasconde,
un brigante si nasconde,
sulla strada del re arriva un cavaliere.....
Por la senda del rey se acerca
un caballero
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Deslizamos un dedo sobre el antebrazo del compañero que tenemos cogido con la mano hasta llegar a la palma
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Este bandido se esconde
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Separamos el pulgar
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este bandido se esconde
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Separamos el índice
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este bandido se esconde
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Separamos el medio
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este bandido se esconde
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Separamos el anular
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este bandido se esconde
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Separamos el meñique
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Por la senda del rey se acerca un caballero...
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Vuelve a realizar el mismo camino que al principio y al llegar a la palma la mano se cierra intentando atrapar nuestro dedo.
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Algunas de las preciosidades que me mandaron después de haber hecho los barcos en clase y haberlos colocado para identificar las perchas del alumnado.
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