Mi hija Clara se ha alimentado de cuentos desde que nació y decidió que lo de comer no iba con ella.
Con cuentos se despertaba y se acostaba, cuentos para una caminata, una tarde aburrida en el dentista o para pasar las cucharadas de cualquier comida que se le pusiera delante.
Desde los ocho años ya contaba cuentos conmigo y con 10 se atrevió a enfrentarse con un salón de actos lleno de gente en la Biblioteca Pública de Almería, asi que no es raro que ahora haya tomado mi testigo y sea la que se dedique a contar cuentos.
Le basta un papel, un trozo de cuerda, unos dedos traviesos, un periódico viejo y zacatras¡ en un instante te ha contado un cuento y se ha metido al público en el bolsillo.
Asi que desde este blog he querido que la conozcáis y que quien quiera disfrutar de sus historias la pueda encontrar, porque a veces como por arte de magia se sube a una nube a ver si atrapa la luna.
¡Qué fantasía tienen las Cuenteras¡¡
Pues pon un vídeo de Clara contando cuentos, porfa!!!
ResponderEliminarTodo se andará.
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