miércoles, 27 de mayo de 2020

CAJA DE CUENTOS

Anne Laval

Crea tus propias historias

Hoy os traigo un nuevo juego para inventar historias. Se trata de 20 cartas puzzle a doble cara para crear historias de hasta 2 metros.


Según indica la misma caja; 
un divertido juego para estimular la imaginación de los más pequeños.
Con las 20 piezas podrán crear sus propias historias combinando e intercalando las ilustraciones y escenas que encontrarán en ambas caras, y jugar con los diferentes finales que  se proponen.
¿Podremos salvar al duende de las garras del lobo?
¿Está ofreciendo la bruja una manzana envenenada?



Con cada juego se escribirá una nueva historia.

Esta es la mía con diez tarjetas que he elegido al azar

1.-Erase una vez una familia de campesinos compuesta por un padre que se ocupaba del campo, la madre que cuidaba los animales y el hijo, de 14 años, que quería ser caballero.
2.-Un día en una de las salidas que el muchacho hizo buscando aventuras, encontró a un lobo que estaba sazonando a un enanito para comérselo como cena.
3.-Distrajo al lobo,  lo ató a un árbol y partió con el enanito que se hizo uno de sus mejores amigos.
4.-Éste lo llevó a ver a sus compañeros que se alegraron mucho al ver que el lobo no se lo había comido y en agradecimiento le ofrecieron un regalo.
5.-Y una foto de recuerdo.
6.-El chico, partió en su caballo despidiéndose de sus nuevos amigos.
7.-Cuando volvió a su casa  le mostró a su padre el regalo que le habían ofrecido,  una habichuela mágica. 
8.-El padre lo miró y le dijo: -pero que ingenuo eres hijo mío, eso es solo una vulgar semilla que lo más que te dará es una planta de habas.
9.-Más no te preocupes, nunca hay que esperar recompensa de los buenos actos. Parte de nuevo y sigue buscando tu camino puesto que ese es tu deseo. 
10.-Y eso hizo, se marchó al bosque y se detuvo a merendar con sus amigas la bruja Noiret y la princesa Jaune, pero al tocar una planta le entró una enorme urticaria y se puso lleno de pintitas rojas. Menos mal que aun guardaba en el bolsillo de su chaleco la habichuela, pues nada más tocarla notó como la erupción desaparecía de su piel y sus amigas dejaron de reírse de él y puidieron merendar tranquilos.










lunes, 25 de mayo de 2020

MAS O MENOS (Più e meno)

de Giovanni Belgrano y Bruno Munari


Este juego está compuesto de 72 cartas de 10 x 10 cm con diversas imágenes. 

48 de ellas tienen el fondo transparente lo que permite componer otras imágenes más complejas, estimulando la capacidad creativa de quienes jueguen.

Superponiendo imágenes de árboles se compone un bosque, sobre el bosque la lluvia, el sol, la luna, el vuelo de los pájaros, un  perro que pasa ... pudiendo modificar el paisaje y la historia a nuestro gusto.

Se puede utilizar para relatar un cuento en grupo. Gana el que consigue encontrar asociar el mayor número posible de imágenes.

Aunque la edad recomendada es de 3 a 8 años, yo la amplio a todas las edades.

Es un material cuidadosamente realizado y de una gran calidad, en que se ve la mano del genial artista y diseñador italiano Bruno Munari.  

 

viernes, 22 de mayo de 2020

GLOBILANDIA

Animales que caben en un bolsillo
Ya sabéis como me gustan las cosas pequeñitas y sencillas con las que en cualquier momento nos podemos entretener, y ésta es una de ellas. 
La tenía en casa desde hace mucho tiempo y ordenando papeles, en este encierro, han aparecido. Era una colección de cuadrados de papel de unos ocho centímetros de lado bellamente coloreados, acompañados de las instrucciones correspondientes para realizar estos maravillosos cubianimales.
La base de todos ellos es el cubo de papiroflexia al que se le llama globo, porque una vez realizados los correspondientes pliegues se le sopla por el orificio que queda y se hincha formando un globo o cubo perfecto. 
Tiene la magia de que se puede realizar con él una olla en la que introduciéndole agua se le puede aplicar fuego sin que el papel se queme. Una de ellas la usé para el cuento de los tres cerditos.


El material está en japonés pero vienen muy bien explicados los pasos, a pesar de que no siguen nuestro orden habitual de lectura, menos mal que si usan nuestra numeración. 
Solo los más pequeños se me hicieron un poco cuesta arriba con los últimos pliegues de las orejitas pues son figuras de un centímetro y medio de  lado.
Para que os hagáis una idea del tamaño de mi "cubigranja", esta es la casita donde guardo a todo el montón de animalitos y sus alimentos.
Los animalitos; tortugas, conejos, hamsters, perros, gatos, un pollito, una calabaza, tres peces, una zanahoria y el cacharro para la comida 


Como podéis observar, las figuras son de forma cúbica, solo varían algunos pliegues en el pollo y las tortugas, en las otras la única diferencia es en las orejas.
En el siguiente enlace tenéis las instrucciones para fabricar un cubo de papel.

https://www.youtube.com/watch?v=V63RrBOP2rM

Y algunos detalles de mis cubianimales

El pollicubo

Los perricubos, los gaticubos  y los conejicubos solo varían sus orejas

Las torticubos,  en este caso el orificio para soplar no está detrás sino por arriba

Y los alimentos 
Calabaza, peces, zanahoria y el cuento para el agua.
Probad y ya me contareis los resultados, pero sorprender, sorprenderéis.


martes, 12 de mayo de 2020

ALEJANDRO

Un cuento con papel y lápiz de Richard Thompson


Conforme se va relatando se van realizando los dibujos 
Un día Jésica llevó a Alejandro al parque: -Espera aquí- le dijo- voy a comprar un globo al vendedor de globos (Se dibuja el globo)

Cuando volvió al lugar donde había dejado a Alejandro vio que se había marchado y como encontró a una mariposa que revoloteaba por el aire (Se dibuja la mariposa) le preguntó: 
-¿Has visto a Alejandro?- La mariposa movió sus antenas y le respondió- No sé donde está  Alejandro, no he visto ningún Alejandro, es más no sé que es un Alejandro, pero puedes ir a preguntarle al pato, el pato es muy cotilla y seguro que lleva el control de todo lo que pasa en el parque, merece la pena que lo intentes. 

Jésica atravesó todo el parque y encontró al pato de cháchara con unas palomas.

-Dónde está Alejandro? ¿Lo sabes? -le preguntó. 
-No querida, no se donde está Alejandro-  le respondió el pato, meneando su colita- no he visto ningún Alejandro, es más no sé que es un Alejandro, aunque yo que tu iría a preguntarle a la rana que vive al otro lado del lago, creo que la he escuchado croar hace un rato. (Se dibuja el lago)

Jésica se fue al estanque y encontró a la rana practicando saltos a la pata coja.
 -¿Dónde esta Alejandro? ¿Lo sabes?- le preguntó.
-No  sé donde está Alejandro- Croó la rana meneando su enorme cabezota,-  no he visto ningún Alejandro, es más no sé que es un Alejandro- y añadió- Prueba con el búho, está sobre aquel árbol alto que ves a lo lejos. (Se dibuja el árbol)

Jésica se fue al otro lado del parque y encontró  un enorme búho dormido sobre la rama de un inmenso pino. 
-¿Sabes donde esta Alejandro?, ¿Lo sabes?- le preguntó. El búho no respondió  porque estaba completamente dormido. 

Jésica escuchó un ruido terrible al otro lado del árbol-¡Alejandro!- gritó, y se apresuró a rodearlo, pero lo que encontró fue una ardilla de colita peluda, pero no vio a Alejandro
-¿Sabes donde  está Alejandro?- le preguntó,-  
No, no, no- respondió la ardilla- no sé donde está Alejandro, no he visto ningún Alejandro, es más no sé que es un Alejandro.  


Jésica decepcionada y nerviosa decidió regresar al mismo lugar del parque en que había dejado a Alejandro. Como la mariposa seguía por allí volvió a preguntarle: 
- ¿Has visto a Alejandro?
- No, no lo he visto, pero dame un minuto que voy a volar por ahí a ver si lo encuentro.
Subió muy arriba a y volvió a bajar y al cabo de un ratito le comentó:
- Hay alguien que viene por allí pero no se si es un Alejandro.

La niña salió corriendo en la dirección que le señaló la mariposa, y si, era Alejandro que traía en la mano una bolsa de papel.
-¡Alejandro!, ¿dónde has estado? te he buscado por todas partes- comentó Jésica enfadada. Y Alejandro  respondió con parsimonia.
-Estaba comprado un regalito- y metiendo la mano en la bolsa sacó dos donuts y le dijo mientras se lo entregaba:
-Uno para ti (se dibujan) y otro para mí.
Y en ese momento se le dibujó en su cara una enorme sonrisa (se dibuja)

Jésica se puso muy contenta por haber encontrado por fin a Alejandro. 
¿Y tú? ¿Sabes ya quién es Alejandro?




martes, 5 de mayo de 2020

DE LOBOS Y DE OVEJAS

Este es un cuento sencillo a la par que divertido que a parte de asombrar a las criaturas se puede contar en cualquier ocasión. 
Para poder visualizarlo bien requiere que se tenga poco público y que se esté cerca de la persona que relata.
Para contarlo, se hacen siete bolitas no muy grandes, del mismo tamaño de miga pan, plastilina o incluso una servilleta de papel. 
Cinco de ellas se colocan en el centro de la mesa a la vista de los espectadores y quien conduce la narración coge una bolita en cada mano y las muestra diciendo:

"Erase una vez dos lobos que vivían en las montañas y que estaban muertos de hambre, así que al ver a cinco hermosas ovejas pastando en el prado tuvieron la idea de capturarlas para tener alimento para unos cuantos días (se señala a las bolitas de la mesa) 
-Mira le dijo un lobo a otro, cuando el pastor no mire nos acercamos, cada uno por un lado, y las atrapamos.

Aprovechando que el pastor se alejaba de la manada para bajar al pueblo, eso hicieron. 
-¡Rápido, rápido!- decía el más espabilado. 
-Yo me llevo una, tu te llevas otra, yo me llevo una, tu te llevas otra.. así hasta que las capturaron a todas.
(Se van cogiendo con las manos donde están los lobos las bolitas de la mesa hasta que no queda ninguna)

Con lo que no contaban era que el pastor regresó antes de tiempo. 
Aun quedaba mucho tiempo para que anocheciera y los lobos eran conscientes de que si daba la voz de alarma los campesinos no tardarían en encontrarlos y abatirlos, así que se dijeron,
-¡Rápido, rápido! hay que volver a dejarlas antes de que nos pillen.
Y eso hicieron mientras murmuraban
 -Yo dejo una, tu dejas otra, yo dejo una, tu dejas otra y yo dejo una. (Se hace así, depositándolas, de nuevo, en la mesa)

Resoplando por el miedo que habían pasado se retiraron a la montaña decididos a esperar la noche en que volverían para llevar a cabo su cacería.

Nada más aparecer las primeras estrellas, cuando  apenas se divisaba un casco de luna, los dos lobos se acercaron a la manada y comenzaron la captura 
-Yo cojo una, tu coges otra, yo cojo una, tu coges otra y yo cojo otra...
Y corriendo con ellas huyeron hasta su guarida y allí mientras las depositaban en el suelo, uno de los lobos le dijo al otro:
-¡Me parece que me estás engañando!
-Bueno, lobo ya sabías que las ovejas eran impares y el reparto nunca podía salir igual para los dos, o ¿se te ha olvidado lo que aprendiste en la escuela?


Cara de sorpresa de los espectadores
-Sí, pero esto no es lo que tenía que resultar y mostró que mientras él había capturado solamente una oveja,  el otro lobo había atrapado, nada menos que a cuatro.

(Se abren las dos manos y se muestra que en una hay cinco bolitas y en la otra dos)

¿Cómo había sido posible?
  
Solución el próximo día

viernes, 1 de mayo de 2020

TIJERETEANDO

Este cuento es un claro ejemplo de como con elementos tan simples como el papel y las tijeras nuestras manos pueden ilustrar y embobar con una historia. 
Me la enseñó una  maestra italiana .


https://www.youtube.com/watch?v=qcZFr1MPLvM&feature=youtu.be

Es muy sencilla y estoy convencida que a partir de esta idea podréis inventar mil y un cuentecillos con que divertir a la gente menuda.

Ya sabéis, papel usado, tijeras, imaginación y a tijeretear.