Barriendo mi cuarto me encontré un dinero.
Con aquel dinero compre una gallina,
que me puso un huevo.
Con aquella gallina y con aquel
huevo,
me compré una oveja que me dio un
cordero.
Con aquella oveja y con aquel
cordero,
me compre una cabra que me dio un
chotuelo,
con aquella cabra y con aquel
chotuelo
me compre una vaca que me dio un
ternero.
Con aquella vaca y con aquel ternero,
me compre un molino con su molinero.
Con aquel molino y su molinero,
me compre una aldea con su torre en
medio.
Y estaba allá arriba mirando hacia el
cielo,
cuando las campanas borraron mi
sueño.
Y ahora bien despierto, barre que te
barre
y por más que barro, ¡dinero no
encuentro!
A. S. Almodóvar (Cuentos de la media lunita)
Para contar este cuentecillo tan simple utilicé unos dibujos realizados por mi compañera Carmen. Plastificadas las imágenes daban mucho juego pues se prestaban a ampliar el cuento hasta limites inenarrables si se añadían otros animales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario